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3 oct 2024

Cómo cambiar el líquido de freno en tu moto de forma segura y eficiente

Cambiar el líquido de freno es una tarea relativamente sencilla, pero es fundamental ser extremadamente cuidadoso al trabajar en los frenos, ya que está en juego la seguridad de nuestra conducción. El líquido de frenos suele cambiarse cuando se realiza el mantenimiento de la suspensión delantera, es decir, en la revisión exhaustiva que se hace cada 7.500 km o una vez al año, lo que ocurra primero.

Elección del líquido de freno adecuado

Es recomendable utilizar un líquido de freno de buena calidad, preferentemente del tipo DOT-4. Para que te hagas una idea, un bote de medio litro de este líquido cuesta aproximadamente 10 euros. No escatimes en la calidad, ya que es un componente esencial para tu seguridad en carretera.

Precauciones con el líquido de freno

Ten mucho cuidado al manejar el líquido de frenos, ya que es uno de los mejores decapantes de pintura. Si derramas líquido sobre una superficie pintada, sécala inmediatamente para evitar que se desprenda la pintura. Además, este líquido es muy susceptible a la humedad, lo que puede hacer que pierda sus propiedades con el tiempo. Al ser altamente absorbente, conviene tenerlo expuesto al aire el menor tiempo posible.

Otra precaución importante es que el líquido de freno es muy resbaladizo, así que si se derrama en el suelo, ten mucho cuidado al caminar por la zona, ya que es fácil resbalarse.

Pasos para cambiar el líquido de freno

  1. Preparar las herramientas:
    Antes de empezar, asegúrate de tener un bote pequeño de cristal (como uno de zumo vacío) y un tubo de goma transparente de unos 30 o 40 cm. A la tapa del bote de cristal, hazle un agujero para insertar el tubo. Este será tu instrumento para purgar el líquido de freno usado.

  2. Conectar el bote de cristal:
    Introduce un extremo del tubo de goma en el bote de cristal a través del agujero que hiciste en la tapa, y el otro extremo en la válvula de purgado de los frenos. Coloca el bote de cristal en el suelo con un poco de líquido de freno en su interior para evitar que retorne aire.

  3. Destapar la bomba de freno:
    Desatornilla los tres tornillos de la tapa negra de la bomba de freno y retírala con cuidado, dejando expuesto el líquido de freno.

  4. Abrir la válvula de purgado:
    Con una llave fija del número 11, abre la válvula de purgado girándola en sentido contrario a las agujas del reloj. Basta con darle un par de vueltas para que empiece a salir el líquido de freno antiguo.

  5. Accionar la maneta de freno:
    Pulsa la maneta de freno repetidas veces de manera suave. Observa cómo el líquido baja por el tubo hacia el bote de cristal cada vez que accionas la maneta. Vigila que el nivel de líquido en la bomba no baje demasiado para evitar que entre aire en el sistema hidráulico.

  6. Reponer líquido nuevo:
    A medida que el líquido antiguo se va agotando, ve reponiendo con líquido nuevo. Recuerda no dejar que la bomba se quede vacía en ningún momento para evitar la entrada de aire en el circuito.

  7. Cerrar la válvula de purgado:
    Una vez que hayas reemplazado todo el líquido antiguo, cierra rápidamente la válvula de purgado para evitar que entre aire en el sistema. Si tienes una válvula antirretorno, te facilitará esta tarea, ya que evita el retorno de aire.

  8. Verificar el nivel de líquido:
    Asegúrate de que el nivel de líquido en la bomba esté entre las marcas de "Min" y "Max", preferiblemente más cerca del "Max". Una vez verificado, vuelve a colocar la tapa de la bomba y ajusta los tornillos, sin apretarlos demasiado para no dañar la tapa.

Finalización del proceso

Al terminar el cambio de líquido, es normal que la maneta de freno tenga un tacto algo esponjoso. Sin embargo, tras accionar la maneta unas cinco o seis veces, este tacto debería normalizarse, volviendo a ser firme y sensible.

Con el cambio de líquido de freno completado, disfrutarás de una frenada más eficiente y segura. ¡Prepárate para conducir con confianza y seguridad!





Color del líquido de freno antes y después del cambio:







1 oct 2024

Soporte para moto o scooter: Lleva tu teléfono o navegador de forma segura y cómoda

Para mí, el uso del navegador en moto es esencial. Si no se hubiera inventado, nunca habría logrado viajar en moto desde Sevilla hasta Escocia, o hasta Austria, como lo hice en otro año, o incluso hasta Cabo Norte aquel verano inolvidable. Ni hablar de los viajes por España, como a Benidorm, o a Valladolid para el evento de Pingüinos, entre otros.

Pero no hace falta recorrer largas distancias para que un navegador sea útil. Incluso dentro de tu ciudad o localidad, puede ser un gran aliado para orientarte. Siempre he sido fiel usuario de TomTom, pero la verdad es que hoy en día es especialmente práctico y cómodo usar Google Maps, que ya viene instalado en todos nuestros teléfonos.

Sin embargo, hay un inconveniente con las motos: el manillar vibra mucho. Si no tienes un buen soporte, o no está bien colocado, el teléfono se mueve demasiado y es difícil ver la pantalla. Además, el sol puede reflejarse en ella, y terminas moviendo la cabeza como un búho para intentar ver algo. Y, peor aún, existe el riesgo de que el teléfono salga disparado. ¡Menuda faena sería eso!

Ya sea que utilices el navegador de TomTom o el del móvil, yo siempre he confiado en los soportes para moto o scooter de la marca RAM. En miles y miles de kilómetros recorridos, nunca, jamás, me han fallado. Es cierto que probablemente son los más caros, pero cuando hablamos de calidad y seguridad, vale la pena pagar un poco más.

RAM ofrece una amplia variedad de soluciones, y una de las que más uso es la que te muestro en la siguiente foto. Es una "U" de acero que se fija al manillar mediante dos tuercas, y puedes ajustarla en cualquier parte donde tengas apenas un centímetro de espacio para trabajar.

A esta "U" va conectado un brazo que sujeta la base donde colocas el teléfono o cualquier otro dispositivo que utilices. La instalación es simple y efectiva, y lo más importante, te asegura que el teléfono estará bien protegido y en una posición cómoda para su uso.




Busqué un sitio para ubicarlo de tal forma que no me interfiera para nada en la vista del cuadro de mandos.


En la Honda SW-T 600, cuando no lo uso lo llevo en una de las dos guanteras como se ve en la siguiente foto:


El conjunto es como te muestro en las siguientes fotos, visto desde varios ángulos para que puedas ver bien todos los detalles. Te recuerdo que si necesitas más detalles, haz clic en cualquiera de las fotos y se te amplia con la máxima calidad que les he podido dar.






Para unir el soporte a la moto sólo hay que asegurarlo girando la pieza pieza número cinco del siguiente esquema:





Y así queda puesto en la moto, a la espera que le ponga el teléfono. Lo he probado tanto por carretera a alta velocidad, aunque permitida, y en el centro de Sevilla que son calles empedradas, y me daba la sensación que antes podía salir yo despedido que el teléfono. Es súper seguro.


Las siguiente ya no son fotos mías sino que de las webs de los vendedores. Esta que te muestro a continuación es de la pieza que se queda atornillada en el manillar de la moto, y el brazo que es de quita y pon.
Aquí ves más detalles del soporte:










A continuación te dejo los enlaces de donde yo los he comprado, por si fuera de tu interés:




22 sept 2024

¿Cómo hacer que tu coche huela a nuevo aunque pasen los años?

Lexus ES 300h


Te cuento una anécdota: en 2012 vendí mi Mercedes-Benz Clase E del 2010 y seguía oliendo a nuevo. ¡Increíble! Pero no es la única vez que me ha pasado. También vendí un Audi A6 con 17 años de antigüedad y aún conservaba ese aroma tan característico de coche recién salido del concesionario. Con mi BMW Serie 3, que entregué a los 3 años, ocurrió lo mismo. ¿Y mi coche actual? Pues tampoco es la excepción. Si entras en él sin ver la matrícula, pensarías que lo acabo de sacar del concesionario.

No sé si ocurre con todas las marcas, pero al menos en los coches que he tenido, si mantienes el interior limpio, libre de polvo y, en la medida de lo posible, de bacterias, es posible conservar ese característico olor a coche nuevo durante años. Y si ya lo has perdido, ¡no te preocupes! Hay formas de recuperarlo. A continuación, te cuento cómo lograrlo.


¿Por qué puede oler mal un coche?


  1. Restos de comida y basura:

    • Descomposición de envoltorios y residuos.
  2. Humedad y moho:

    • Se adhieren a los tejidos y provocan mal olor.
  3. Fumar dentro del coche:

    • Humo del tabaco impregna asientos y alfombras.
  4. Olores de mascotas:

    • Pelo, saliva o problemas de salud de los animales.


El mal olor en el coche puede ser causado por restos de comida, basura, humedad, moho, fugas de líquidos, fumar o el olor de mascotas. Para prevenirlo, es esencial mantener el coche limpio, ventilarlo y evitar comer dentro. Entre los métodos para eliminar estos olores destacan el uso de productos de limpieza, desinfectantes y neutralizadores de olores, aunque el más efectivo es el tratamiento con ozono, que desinfecta y elimina las bacterias y hongos responsables del mal olor, garantizando un 99% de efectividad sin dañar el medio ambiente.


Estrategia para quitar los malos olores del coche


  1. Limpieza regular:

    • Retirar basura y restos de comida.
    • Limpiar salpicadero, volante, tapicería y alfombras.
  2. Ventilación frecuente:

    • Abrir ventanas para que circule aire fresco.
  3. Productos de limpieza:

    • Dependiendo del caso, usar desinfectantes y limpiadores de tapicería.
    • Aplicar neutralizadores de olores.
  4. Tratamiento con ozono:

    • Elimina bacterias, moho y olores al 99%.
    • Garantizado y respetuoso con el medio ambiente.


En este esquema he resaltado la palabra volante porque igual te va a sorprender este dato: el volante de un coche es cuatro veces más sucio que un baño público y dos veces más sucio que los botones de un ascensor público.


Una vez que lo tenemos claro que la limpieza del interior de nuestros coches no es sólo un capricho estético, ahora te cuento qué hago yo:


1. Limpieza a fondo: como en casa, primero lo básico

Lo primero que tienes que hacer es quitar todo el polvo del interior, igual que cuando limpias tu casa. Usa una aspiradora y limpia bien cada rincón del coche. No te olvides de las alfombrillas. Un truco: yo las quito y las meto en la lavadora de vez en cuando. ¡Quedan como nuevas!

2. La magia del ozono

Aquí viene el truco más potente: usa una máquina de ozono. Yo tengo una (aunque la mía no es de las mejores) y te aseguro que funciona de maravilla. Cuestan menos de 100 euros y te durarán toda la vida. Si quieres ahorrar, puedes comprarla a medias con un vecino, un amigo o tu cuñado, ya que solo la necesitas usar una vez cada tres meses.

¿Cómo funciona? Muy fácil: pones la máquina a funcionar durante una hora con el coche encendido y el aire acondicionado en modo de recirculación. Así, el ozono desinfectará tanto los conductos como los filtros del aire acondicionado y todo el interior del coche. Eso sí, después asegúrate de ventilar el coche al menos otra hora para eliminar el exceso de ozono. El olor que deja es muy particular, ya verás.

3. Deshazte de las bacterias

Con este proceso, habrás eliminado el 90% de las bacterias que son las culpables de que tu coche no huela tan bien como debería. Al limpiar y desinfectar de esta manera, no solo mantendrás el interior impecable, sino que recuperarás ese aroma a coche nuevo que tanto nos gusta.


¡Y eso es todo! Con estos simples pasos, tu coche olerá tan bien como el primer día, y si sigues haciéndolo cada cierto tiempo, ese aroma perdurará por muchos años. ¡Te aseguro que vale la pena!




Después de usar la máquina de ozono y ventilar el coche, toca hacer una limpieza más detallada. Agarra una bayeta húmeda y repasa todo: puertas, salpicadero, asientos y cualquier superficie que pueda acumular polvo. Es una limpieza rápida pero efectiva, y deja todo como nuevo.

Ahora que el coche ya está limpio, llega el momento de darle el toque final. Yo uso Maddox Premium Detail, que es un producto 2 en 1: limpiador y abrillantador para interiores. Es ideal para los salpicaderos, gomas y plásticos, ya que no solo limpia, sino que también los hidrata. Y lo mejor de todo es su aroma a limpio, ¡una maravilla!

¿Cómo se usa? Muy sencillo. Pulveriza un poco de producto sobre una bayeta limpia y pásala por todas las superficies: el salpicadero, las puertas, y si tus asientos son de cuero, ¡también por ellos! No solo los dejará limpios, sino que les dará un brillo suave y agradable, hidratando el material sin que te preocupes por manchas en la ropa. Es una forma fácil y rápida de dejar tu coche impecable y con un aroma que hará que siempre se sienta como nuevo.







Cuando toca lavar el exterior del coche, lo mejor es el método tradicional: un cubo de agua con champú especial para coches, una esponja suave y frotar sin presionar demasiado para evitar rayones. Luego, para quitar la espuma, lo ideal es usar una manguera, aunque si no tienes una a mano, varios cubos de agua limpia harán el trabajo. Eso sí, una vez enjuagado, es crucial secar el coche para evitar esas molestas manchas de agua que aparecen cuando se seca al aire.

Si no tienes tiempo o prefieres una solución más rápida, puedes optar por una máquina de lavado, pero asegúrate de que sea una de filamentos suaves, ya que las más agresivas pueden dejar marcas en la pintura. Esas pequeñas líneas en la carrocería pueden hacer que tu coche pierda ese brillo tan especial.

Detalles que hacen la diferencia

Antes de terminar, con las puertas abiertas, asegúrate de limpiar bien los marcos internos y externos de las puertas. Este es un detalle importante que a menudo se pasa por alto, pero que marca la diferencia. Esos rincones no los alcanza ninguna máquina de lavado, así que tendrás que hacerlo a mano, con paciencia y cuidado.

No olvides abrir la tapa del depósito de combustible. Limpia bien esa zona y sécala. Ser detallista con estas pequeñas áreas es lo que realmente eleva la calidad del trabajo.

El toque final: brillo intenso con cera de Carnauba

Si realmente quieres que tu coche se vea espectacular, te recomiendo usar el Maddox - Quick Detailer con Cera de Carnauba, que es perfecto para dar a la carrocería un brillo intenso y duradero. Además, su aplicación es muy sencilla:

  1. Pulveriza el producto directamente sobre la carrocería limpia y seca.
  2. Extiende el producto con una bayeta limpia, asegurándote de cubrir bien toda la superficie.
  3. Usa otra bayeta para repasar y homogeneizar el brillo.

Consejos clave:

  • Aplica el producto por secciones (techo, puertas, capó, etc.) para trabajar de manera ordenada y evitar que el producto se seque antes de poder pulirlo.
  • Cambia la bayeta cuando se ensucie para evitar arañar la pintura.
  • Nunca lo apliques sobre superficies sucias, ya que esto podría provocar micro rayas y hacer más daño que bien.

Con estos pasos, dejarás tu coche reluciente, como recién salido del concesionario. El esfuerzo en los detalles es lo que realmente hace que tu coche destaque y luzca impecable.


¡Espero que estos consejos te ayuden a mantener tu coche como nuevo durante mucho tiempo! Y recuerda, la clave está en ser constante con la limpieza y en cuidar cada detalle. ¡Tu coche te lo agradecerá!

Te dejo unas fotos y recuerda que haciendo clic en ellas las verás con mucho más detalle.





























Te invito a que veas un video de 2 minutos inspirado en este artículo: